martes, diciembre 20, 2005

muy a lo lejos

no esperaba nada de ese día , tomo la taciturna necesidad de caminar sin ni siquiera pensar a donde llegaría , jugar con su sombra cuando esta lo permitía , observar el vaivén de los árboles , los mas delgados y altos y el sonido del viento que parece cambiar de tonalidad cuando los golpea ; a lo lejos la estación , muy a lo lejos , muy lejos del sol que remitía en inmanencia , no conocía el nombre de los árboles ni su origen pero estaba bueno que estuvieran allí , sauces , fresnos , no se , sentía su aroma hoy ... lo que quedaba del pueblo era viejo , estación , templo , escuela , fabrica , el cementerio también , y es curioso porque mis recuerdos hacia las personas es como las de un gran juego de niños , pero , hoy veo a esas personas diferentes , sus rostros , son ellos pero viejos ; esta ves no se por que volví pero siempre lo ago , quizás me sienta consultansiado con esos monumentos rehuidos , los de la plaza , quienes serán ? esos rostros no han cambiado , siguen siendo amplios , severos , imposibles descifrar sus miradas impolubles , sin brazos , sin alma ... cuando llegue el atardecer saldré del letargo de mis sueños , volveré a caminar por las ruidosas avenidas extraviado en mi apacible soledad , es muy posible que por esas horas vuelva a ser un fantasma y extrañe el calor de este cuerpo , ni bien parte el tren comienzo a tener esa sensación , así me alejo del pueblo , allí donde alguna ves fui yo .